El autodiálogo es el conjunto de verbalizaciones dirigidas hacia uno mismo que, siendo multidimensionales y dinámicas, cumplen una función para el Powerlifter u otro deportista.
Entre sus funciones y efectos, el autodiálogo permite alterar el foco atencional (cognitivo), aumentar la motivación intrínseca (motivacional), mejorar el aprendizaje técnico (conductual), y reducir la ansiedad deportiva (afectivo)
Parece ser el autodiálogo debería ser elegido por el propio atleta, para así ser más motivante, y que el autodiálogo positivo podría ser más beneficioso que el negativo.
Una herramienta muy útil para adoptar un autodiálogo más adaptativo es la de la parada de pensamientos, que se basa en:
Aumento de la atención hacia los propios pensamientos. ¿Qué me digo a mí mismo sobre mi rendimiento?
Utiliza un disparador (palabra, imagen o acción) para detener esos pensamientos. “Ya basta de pensar así”
Reemplazar mi autodiálogo por pensamientos más adaptativos. “Voy a convencerme de que puedo y centrarme en mis puntos fuertes, SOY CAPAZ”
En el contexto del deporte y el caso en particular del Powerlifting, el autodiálogo facilita el aprendizaje y el rendimiento. Esto se debe al hecho de que nuestros pensamientos repercuten en nuestras emociones/sentimientos y estos a su vez facilitan o dificultan nuestra conducta. La relación recíproca entre pensamientos, emociones y conducta puede determinar el éxito en cada entrenamiento y competición.
-Arvinen-Barrow, M. & Walker, N. (2013) The psychology of sport injury and rehabilitation. New York: Routledge
-Dobson, D. & Dobson, K.S (2017) Evidence-based practice of cognitive behavioral therapy. New York: The Guilford Press
-Hatzigeorgiadis et al (2011) Self-Talk and Sports Performance: A Meta-Analysis. Perspect Psychol Sci. Jul;6(4):348-56
-Hatzigeorgiadis A & Galanis E (2017) Self-talk effectiveness and attention. Curr Opin Psychol. Aug;16:138-142